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martes, 27 de noviembre de 2018

#6 El perfecto y su primera experiencia gay

Esto pasó cuando vivía en monterrey, tenía 19 años recién cumplidos,  entré al entonces messenger y se abrió una ventana de conversación, era Jesús, un chavo que había conocido en una sala de Chat, yo había puesto que buscaba un vato varonil y closetero, y él me había contactado por mensaje privado.
Intercambiamos nuestros correos y nos agregamos al messenger, ahí me comentó que el tenía curiosidad de experimentar con un hombre, después de platicar varios días quedamos en
vernos, lo cité en una plaza que queda cerca de donde vivía,  yo compartía casa con otros chavos, pero ellos no sabían de mi preferencia.
Me fuí a la plaza un poco antes de la hora en que calculé llegaría, me senté en una banca viendo hacía la parada del transporte y justo unos minutos después él bajo en la banqueta de enfrente, tenía una estatura promedio, se veía que hacía deporte, bien peinado y lo que más me llamó la atención fueron sus ojos de un color gris y sus labios rojos, verlo caminar hacia mi me atontó un poco pero reaccioné y levante la mano y saludé, viéndolo cerca confirme que tenía brazo ancho y buena pierna, eso fue algo rápido ya que llegó a donde yo estaba, saludó como si me conociera de toda la vida.
Platicamos un rato ahí sentados sobre todo de cómo yo me inicié, le conté lo del primer relato, y noté que algo reaccionó en su entrepierna, traté de no verme muy enfermo jaja, así que le pregunté a él sobre su vida sexual, y me dijo que sólo había tenido experiencia con mujeres, pasó un buen rato en el que platicamos de cosas sin importancia, y sin esperarlo me dijo que tenía sed, yo no era un ingenuo y me dí cuenta de sus intenciones, pero si note que el estaba nervioso,  le dije que vivía cerca si quería fuéramos a mi casa, el aceptó , así que me levanté y el me siguió caminamos al par, íbamos platicando de cosas triviales como cualquier par de amigos
En la casa estaban mis Roomies, lo presenté como compañero de la facultad, y le serví un vaso de agua y lo llevé a mi cuarto y dejé la puerta abierta, platicamos sobre matemáticas lo juro, para pasar el tiempo y que mis compañeros de casa no sospecharan algo.
Pero el destino quizo que mis roomies decidieran ir a comprar comida y salieron de la casa, en cuanto cruzaron la Puerta para salir a la calle, le pregunté a Jesus si quería hacer algo, pero salió bien ranchero, y sólo se quedó sentado, yo para entonces ya estaba exitado y a él se le notaba que estaba igual, tome la iniciativa, lo pare de donde estaba sentado y me acerqué a él sin abrazarlo solo juntando su cuerpo con el mío, cerró los ojos y se dejó hacer, puse mi boca sobre su cuello y el se puso rígido pero no se quitó, así que respiré su aroma y fue como si hubiese sido poseído, su aroma me puso al mil y su respiración se agitó al compás con la mía, fue entonces que el puso su mano en mi espalda para acercarme más, fue entonces que sentí su miembro, estaba durisimo, puse mi mano en su paquete y lo sobe,  con la otra lo tomé del cinto hacia mi, me dijo que si se la podía sacar, ternura,  le ayudé, lo pegué a la pared y juntos sacamos su verga, era bella una de las más bellas que he visto, gruesa y de largo perfecto, aperlada a tono con su piel, su vello estaba recortado, y ya tenía una gotita de precum, no me resistí y me inqué, le pedí permiso, cosita, y el sólo movió la cabeza en señal, ya lo tenía en mis manos, le dí besitos, tenía un olor exquisito y sabor acorde, ¿Dónde había salido?, el gimió sin abrir la boca, un gemido sumamente varonil, su mano bajó a mi cabeza y me tomó la cara como acariciando, chiquito, chupé la cabeza y lo tomé de las nalgas, seguí con un poco del tronco y luego lami todo de arriba a abajo y al contrario, él solo gemia y sus pies se quedaban en punta, bajé su pantalón a las rodillas y sus pierbas definitivamente eran de jugador de fútbol, le chupe los costados de las piernas y regresé a la verga, sentí que se ponía rígido así que pare y me levanté,  junte nuestras vergas que para entonces ya la tenía fuera de mi boxer, pero sin bajar el pantalón,  el seguía con los ojos cerrados y su mano se fue a mi verga la sobó y la jalo, pero yo tenía ganas de seguirle dando placer, así que lo llevé a la cama y lo senté y le bajé el pantalón a los tobillos lo hice caer a la cama
Me subí sobre el y frote nuestras vergas, le besé el cuello y las mejillas, a un lado de los labios y el se ladeo un poco, me aparte y desabroche su camisa, tenía un cuerpo trabajado sin exagerar, sus pezones eran chiquitos y entre rosados y morenos, los lami y baje a su ombligo, regresé a su cuello y el ya tocaba todo lo que podia con sus manos, yo regresé a atender su verga y lo hice acabar, no se le bajó y nuevamente frote mi verga con la suya y no sin antes pedirle su aprobación lo comencé a besar en los labios, era un dios besando, o talvez se esmeró en agradecimiento, estaba en eso cuando se escucho que venían llegando mis roomies,  en chingada nos acomodamos las ropas y le limpie con una playera que tenía a la mano, le di un último picó(beso) y nos salimos del cuarto cuando ellos iban entrando,  seguimos con lo de matemáticas y después de un rato pasó al
Baño, poco después se tenía que ir así que me pidió que lo acompañará, en el camino me dijo que era su mejor experiencia y eso que no hubo penetración, que quería terminar lo que empezamos y quedamos, lamentablemente para él y para mi el destino no quiso que eso pasará, se atravesó en nuestro camino una relación de varios meses que mantuve con alguien.

2 comentarios:

  1. Me encanta... Gracias tigre libero gracias de verdad.. Mis chaquetas mentales son tuyas papi chulo 😎

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  2. Están ricos tus relatos me gustan en verdad me excitan mucho

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